La actriz comentó desde el atril, en el momento de recoger su galardón, que cuando vió a Kate Winslet recoger hace dos años su premio, le pareció "jodidamente fácil". Le traicionó la emoción del momento y su cómico 'fucking' dio la vuelta al mundo en cuestión de minutos.
Pasada la vergüenza del momento, Melissa Leo ha pedido disculpas públicamente por su comportamiento "inapropiado" y ha asegurado que no pretendía ofender a nadie, sobre todo a los organizadores de los Oscar, por la palabra malsonante que se le escapó en su discurso durante la gala.
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